Caos en el campus de Fuenlabrada de la URJC

El viernes pasado antes de las clases en la Universidad Rey Juan Carlos de Fuenlabrada, se realizó un control de acceso en todas las puertas al campus. Un grupo de vigilantes de seguridad registraron a todos los alumnos y les solicitaron presentar sus carnés de estudiantes para poder acceder.

Como cada mañana, los estudiantes de la URJC del campus de Fuenlabrada se dirigieron al mismo para acudir a clase. Cuando llegaron, se encontraron con media docena de vigilantes de seguridad contratados por la universidad que les impedía el paso, quien quisiera entrar a la universidad debía mostrar el carné de estudiante y enseñar sus pertenencias a los agentes. Los estudiantes que acudían en coche también fueron sorprendidos por una larga cola para entrar al campus, dos agentes más pedían en la puerta el carné de estudiante, y en algunos casos incluso registraban los vehículos.

La indignación se percibía en el ambiente, y enseguida empezaron a salir comentarios al respecto en las redes sociales. Nunca antes había sido necesario el carné de estudiante para acceder al campus, muchos alumnos de hecho ni siquiera lo tienen, como es el caso de los alumnos de primero, sin duda los más perjudicados, que todavía no lo tienen. Al parecer, la razón de los registros se debe a que para el pasado viernes había sido convocado un macro botellón en el campus.

Dos viernes antes, tuvo lugar dentro del campus una fiesta de bienvenida para los alumnos de primero. En esa ocasión también se contrató a un grupo de vigilantes para controlar que nadie metiese alcohol en el campus. Sin embargo no se procedió al registro de mochilas, bolsas o coches.

¿Tienen derecho los vigilantes a registrar a los alumnos? La respuesta está aquí.